Índole
de Clorinda Matto de Turner (1891)

Al igual que en Aves sin nido, en Índole Matto de Turner encara la situación de los clérigos, el celibato sacerdotal y la limpieza de la Iglesia.  Índole es una novela del realismo peruano, en la cual los presupuestos positivistas y el naturalismo constituyen el centro de la cuestión.  En este sentido, Índole no es una novela indigenista en sí, sino sólo tangencialmente, en tanto atiende a uno de los temas tradicionales.

Eulalia López  está casada con Antonio.  Son una pareja relativamente joven, que intenta mantener puro y fuerte el lazo del matrimonio.  En parte por esto y en parte a causa de sus ideas político-religiosas, Valentín se opone a que su devota esposa se confiese y aún que asista regularmente a los servicios religiosos.  Si bien esto perturba a Asunción, cumple (temporalmente) con el pedido de su esposo.

Asunción Vila, casada con Valentín Cienfuegos, el socio de Antonio, cela a Eulalia.  La bondad, humildad y caridad de ésta, junto con su belleza y juventud, hacen que Asunción desconfíe.  Es más, según Asunción, Eulalia  le es infiel a su esposo.  A fin de probar esto, Eulalia hace que uno de sus sirvientes (indios) y una vendedora de tejidos sirvan de espías.

El señor Peñas, sacerdote de la iglesia a la que pertenecen Asunción y Eulalia, y confesor de la última, está perdidamente enamorado de la señora de López.  Es éste el motivo por el cual insiste en que Eulalia se confiese con él y quebrante la promesa hecha a su esposo en cuanto a los servicios religiosos.  Eulalia accede, mas bajo el pacto que todo será en secreto, a fin de no agraviar a su esposo.  Peñas aprovecha este ocultamiento a fin de allanar el camino al corazón de Eulalia y quebrantar sus votos matrimoniales.  Asunción no es extraña al arreglo, en tanto Eulalia la ha hecho partícipe de su nuevo confesor.  De esta manera, y a causa de la buena reputación que el sacerdote posee a los ojos de Asunción, ésta concluye en que Eulalia debe ser, después de todo, una buena persona, y las cosas buenas que se cuentan de ella, ciertas.

En una visita a la hacienda de los Cienfuegos, en un momento en que el sacerdote logra quedarse a solas con la señora de López , intenta besarla, expresándole sus sentimientos y pidiéndole una oportunidad para materializarlos.  La señora de López, sorprendida ante la declaración (y las acciones) del sacerdote, huye, dejándolo solo.  El sacerdote despechado decide tomar venganza y hurta un documento de negocios que compromete a López y Cienfuegos, para presentarlo ante las autoridades.

Simultáneamente, de este mismo documento, y de su situación política-económica, Valentín y Antonio habían discutido para no llegar a ningún acuerdo.  Sin embargo, a posteriori, cuando Antonio  es llamado a declarar y se halla en una situación difícil, que puede resultar en su procesamiento,  Valentín se presenta, aclara la cuestión y logra la exoneración de su amigo y socio.

La “índole” —“eso que los moralistas llaman inclinaciones y los factistas califican de predestinación” (Matto, Índole 97)—, para el bien o para el mal de cada uno de los personajes es lo que triunfa y lo que determina el fin que cada uno tiene en la novela.

Bibliografía

  • Matto de Turner, Clorinda. Aves sin nido. Estudio preliminar de Fryda Schultz de Mantovani. Buenos Aires: Hachette, 1968.

  • ---. Índole. Prólogo de Antonio Cornejo Polar. Lima: Instituto Nacional de Cultura, 1974.

 

© Marina Herbst,
El concepto de identidad iberoamericana como elemento posibilitador del discurso indigenista. 2003.